Viernes:
Salí de mi casa con un par de tragos y un poco de humo verde dando vueltas en mi cabeza camino a Pta. Brown, no es del tipo de disco que suelo frecuentar pero ahora había un buen motivo, Nicole tocaría para nosotros nuevamente.
Entré por la lista de invitados de la artista y el guardia se llevó una reprimenda por no querer darme pase “es amigo de Nicole” le grito en su cara el dueño de la discoteca al ver la negativa del mastodonte, me dieron un pase de periodista, lo que me dio acceso al VIP y a pasearme por los camarines y el escenario como se me antojara, aproveché de dármelas de fotógrafo oficial y saqué más de 480 fotos, de las que salieron algunas muy buenas, me sorprendí a mi mismo con la calidad de algunas de ellas, además me sentí genial haciéndolo, encaramado en el escenario y con la diva posando para mi lente, la pasé muy bien y el show estuvo sólido. En la canción “1-800 nasty show” Nicole se nos volvió loquita sobre el escenario y con unas sacudidas de cabeza y meneos de cuerpo nos dejo a todos locos, realmente estuvo in-cre-í-ble.
Después los chicos se quedaron a dormir en mi casa por lo que el carrete continuo un buen rato, me fui a dormir medio ebrio y agotado (una buena noche).
Sábado:
Desperté tarde, la Pame estaba halando por celular en el living de mi casa, me duché y salimos a darnos una panzada de sushi (ma-ra-vi-llo-so). Después me fui a buscar un montón de VHS que quedaron en mi antiguo hogar y que estaban a punto de parar en la basura, no podía permitir que unas cintas con cosas importantísimas de Nicole se perdieran de ese modo. Después llegué a mi casa de nuevo y ordené un poco la cagá que había quedado la noche anterior.
Mi novio llegó un poquito tarde (para variar) y nos fuimos volando al cumpleaños de mi amiguita Ale, donde nos esperaba una increíble y pintoresca fiesta con poquitas personas, pero cada cual mas divertida, carismática y amorosa que la otra, ¡que gente más divertida y maravillosa!, fue un momento muy grato y entretenido. Después de eso... volamos a plaza Italia donde nos estaría esperando Pame (mi amiga) y Jorge (amigo de mi novio), de ahí rajados a Blondie porque estaba por empezar otro concierto de Nicole. Discoteca llena y el publico prendidísimo, lejos uno de los mejores conciertos a los que he ido, el publico ardía, coreaba, cantaba, silbaba y aplaudía. Yo grite, canté y salté como loco pero siempre aferrado con fuerza a la mano de mi novio y en más de algún momento me emocioné tanto, que un par de lagrimas estuvieron a punto de abandonar mis ojos.
Luego me fui tras bambalinas a saludar y felicitar a la artista, además de entregarle un regalo que le prometí la noche anterior (no voy a contar lo que era para que mañana no salgan titulares escandalosos en las ultimas noticias), había tanta gente y periodistas alrededor de la muchachita (eso que estaba en un lugar donde no cualquiera podía entrar) que esperé junto a la banda y a la producción sentadito y tomándome un traguillo en un lugar donde solo ella podría entrar cuando se desocupara de tanto ajetreo. Cuando por fin pude hablar con ella y entregarle lo que le tenia ya había pasado mucho rato, regresé corriendo a buscar a mi novio, pero no lo encontré, me desesperé y angustié mucho pero cuando por fin lo encontré, estaba un poco molesto conmigo por dejarlo tanto rato solo (entendible), afortunadamente se le pasó después de un ratito cuando le di las disculpas pertinentes. Terminó la disco y nos invitaron a continuar el carrete junto Nicole en el Dpto. de un amigo, pero decidimos ir a descansar a nuestra propia casita mejor.
Domingo:
Día tranquilo hasta las 6 o 7 de la tarde cuando un amigo de mi novio lo llamo contándole que el muchacho con el que estaba saliendo había terminado con el vía sms (que más bajo que eso). Pobre niño, decidimos de común acuerdo ir a apoyar al amigo y tratar de hacer que pasara un buen momento, también estaba Jorge, el amigo con el que fuimos a Blondie la noche anterior. Fuimos los cuatro al cine a ver una película llamada “Proof” un drama psicológico, protagonizado por Gwyneth Paltrow. Después salimos en busca de un lugar donde rematar con una botella de vino y una tabla de quesos, pero terminamos en el “capricho español” con la planeada botella de vino pero acompañada de unas ricas creep de pollo y queso, además de varias carcajadas y grato momento (siento que les estoy agarrando cariño a los amigos de mi niño, son lindas personas de bellos sentimientos, me alegra mucho que se rodee de gente así).
De esta velada salió el bosquejo de un viaje a la casa de la playa junto a los muchachos (amigos de mi novio) para la próxima semana, cosa que augurio a “bien entretenido”. Por lo demás le debo una rica cena a Fabricio, muy gentil el muchacho no nos dejó pagar nada en toda la velada, corresponde que le haga algo lindo para agradecer el gesto y además para alegrar al muchachito, que no esta pasando por un buen momento sentimental, ¡pero animo cabro! Lo estas haciendo muy bien, tu actitud es la correcta, me sorprende el grado de madurez y entereza con el que abordaste el asunto, creo que no cualquiera podría haber actuado de la forma correcta bajo esas circunstancias, como ya te habían dicho antes “el se lo pierde”, creo que eres una linda persona y ya llegará el momento con el hombre adecuado para ti (No se porque digo esto acá si el muchacho tal vez ni siquiera lea esto jamás, pero igual deseo que esté bien, creo que por eso escribo esto).
Bueno, el fin de semana no pude terminar mejor, abrazado al hombre que, amo en contacto con su piel y abrazado a sus sueños.
¡Te amo!
